Me gusta iniciar esta entrada a modo de homenaje con el nombre de una de las canciones favoritas de john lenonn hombre que recordamos por ser el dia 9 de Octubre su cumpleaños y cuyas canciones resuenan por las paredes de mi casa (lo siento amor) cuya temprana desaparicion nos dejo a todos un interrogante: ¿The Beatles se hubieran reunido si el hubiera seguido vivo? lo mas seguro hubiera sido que si ya que las tensiones habian desaparecido 8 años despues de su desaparicion y que mejor forma de ganar dinero para una banda que una reunion? hubiera sido muy interesante ver el resultado, a todo el mundo le hubiera encantado.
Para el dia de hoy les traigo un relato tragicomico de malos entendidos y por supuesto de tragedia espero que lo disfruten. Por supuesto muchas gracias por sus comentarios y este blog continuara hasta que termine escribiendo en las paredes (lo siento amor)o amarrado en una camisa de fuerza, lo que pase primero.
EL ARMA
Debajo del cajón de sus camisas mi papá guarda su revolver, acabo de encontrarlo, no se como llegó ahí después de lo que pasó, pensé que la habían recogido, pero ahora era mía, mi papá si me lo había dicho antes de esto “Hijo, algún día cuando crezcas podrás defender a tu familia tan bien como tu padre”, Por algo nunca nos habían robado ni molestado, yo no tenia nada de que preocuparme, mi papá siempre nos cuidaría a mi mamá, a mi hermanita Maria y a mí, a pesar de que a veces llegara borracho y nos pegara a mi mamá y a mí, no importaba, por que el nos mantenía seguros, como aquella vez en que un muchacho nos trató de robar a mi papá y a mí, nos mostró un cuchillote, y mi papá entonces sacó su arma y le disparó a ese ñero, como dijo mi papá “¿Si vez hijo?, eso es todo lo que ellos merecen” hasta me trató de defender de mi mamá, cuando ella llegó esta noche muy tarde, yo se, porque ya había pasado mucho rato en que debia estar dormido, mi papá estaba ocupado tomando de su botella especial otra vez, no me deje ver porque cada vez que bebía de su botella especial siempre me pegaba, entonces llegó mi mamá, parecía enferma porque estaba mareada y no se podía sostener bien, iba a salir pero mi papá se levantó de su silla y la cacheteó duro, la tumbo al piso, mi mamá empezó a llorar le empezó a gritar un montón de cosas que a mi me prohíben decir, entonces mi papá saco su arma y la apuntó yo se que no le quería disparar que solo la quería asustar, el pensaba que el arma estaba descargada, pero yo le puse las balas como el me había enseñado, cuando empezaron a sonar unas sirenas me dijo que me quedara en mi cuarto y no saliera por nada el mundo, que cuidará a mi hermanita y que siempre la defendiera, después empecé a oír un montón de explosiones como si fuera día de las velitas, y después esperé, fui hasta el cuarto de mis papás, y miré en el cajón debajo de las camisas, ahí estaba el arma, con esto puedo defender a mi hermanita, la voy a llevar mañana al colegio y les voy a mostrar a todos lo bien que defiendo a mi familia.
domingo, 11 de octubre de 2009
domingo, 4 de octubre de 2009
La ficha de la semana
Soy yo o ya los periodicos no pueden dar mas malas noticias. Siento que enterarme de lo que pasa en el mundo y en mi pais es similar a cortarse la piel cuandote quieres desahogar: Sabes que es malo para ti odias la sangre pero no puedes dejar de hacerlo, la ingenuidad de la decada anterior y la creencia que el nuevo siglo traeria cosas mejores se desvanecen mientras horrores que creiamos superados vuelven a ritmo escalofriante no se si estoy leyendo titulares de hoy o de hace 40 años: rearme atomico compra de armas aumento del hambre en el mundo(de acuerdo al diario el tiempo 1 niño muere de hambre cada 6 minutos mientras nuestros campesionos se les priva de subsidios por darselos a clases favorecidas y cuando se les da lo sdeciden gastar en todo menos en comida. A donde putas vamos a ir, por otro lado el dictador figura de mediados de siglo pasado vuelve con un fervor que atemoriza y como todo lo de estos tiempos modernizado y camuflado para el dia que nos demos cuenta su destino estara en sus impredecibles manos , no se ustedes pero no podre dormir tranquilo en lo que resta de milenio, y despues se quejan por que soy tan oscuo al escribir... Por cierto hablando de dictadores esta semana les traigo un conmovedor relato que nos demuestra parafrasenado a john lennon "La guerra se acaba (si tu quieres)
EL PODER DEL PERDON
- Mi General… Perdón, Señor Presidente, la madre de uno de los desaparecidos ha insistido en venir a verle y aquí esta ella con un permiso de audiencia del embajador de Estados Unidos
- Carajo, bueno, hágala pasar… A palabras necias…
El General se recuesta en su ergonómica silla mientras contempla una pintura del Libertador quien a su vez lo observa con un gesto serio y aprobatorio desde el otro lado del cuarto, 5 minutos después, y luego de una esmerada requisa, se le permite a la madre cruzar la puerta de la oficina del General, digo, Presidente, como era su primera vez en esa habitación, riega una mirada sobre esta para terminar en los ojos del General. Camina hacia él con un paso lento pero seguro, mientras dice:
- Señor General, es un gusto estar frente a usted ahora – sigue caminando hasta el escritorio – y el objetivo de mi visita es, a nombre mío y de las demás madres de los desaparecidos… - Aquí, la madre se toma una pausa y sigue caminando – es perdonarle por lo que le hizo a nuestros hijos e hijas.
- ¡¿Qué?! Responde el General.
- Asi es, señor General, lo queremos perdonar por habernos robado a nuestros hijos de nuestro lado. – La madre sigue caminando con un paso mas resuelto ahora – lo perdonamos por torturarlos, desollarlos, despellejarlos, matarlos, violarlos, masacrarlos… - El General empezó a sudar a raudales.
- ¿Qué esta diciendo bruja tonta? ¡No camine más!
- …Y luego arrojar sus cuerpos al mar… Y siguió caminando hacia él
- ¡Teniente, teniente! – Afanosamente buscó entre sus cajones su arma de dotación – Señora, le advierto, no de un paso más.
- A pesar de todo lo que nos hizo lo perdonamos…
Con sus manos temblorosas el General tomó la vieja arma y descargó los seis disparos en el cuerpo de la madre sin fallar. Esta solo retrocedió unos dos pasos y los retomó. Mientras, ella decía:
- Lo que usted hizo, sabemos que tiene sus razones y aunque no las sepamos, lo perdonamos… - La madre abrió sus brazos como si fuera a recibir a su hijo de un largo viaje que al fin concluyó y regresa a casa.
El General se queda sin aliento, una fuerte opresión en el pecho le hace soltarse la corbata, cada vez respira menos, se apoya en el escritorio y la taquicardia aumenta mientras continua sudando y el tono de su cara es de un rojo intenso, sigue viendo a la madre la cual esta en la misma posición de abrazo en espera, ella de repente ya no lo mira, entorna los ojos en blanco y cae al suelo, mientras que el general hace lo mismo pero lo ultimo que alcanza a ver antes de caer un telón oscuro son los ojos de la madre que lo continúan viendo con la ternura que solo las madres pueden transmitir con la mirada, esto infunde miedo en el infartado corazón del General y este miedo se dirige hacia su rostro dejando un gesto que el Teniente jamás podrá olvidar.
EL PODER DEL PERDON
- Mi General… Perdón, Señor Presidente, la madre de uno de los desaparecidos ha insistido en venir a verle y aquí esta ella con un permiso de audiencia del embajador de Estados Unidos
- Carajo, bueno, hágala pasar… A palabras necias…
El General se recuesta en su ergonómica silla mientras contempla una pintura del Libertador quien a su vez lo observa con un gesto serio y aprobatorio desde el otro lado del cuarto, 5 minutos después, y luego de una esmerada requisa, se le permite a la madre cruzar la puerta de la oficina del General, digo, Presidente, como era su primera vez en esa habitación, riega una mirada sobre esta para terminar en los ojos del General. Camina hacia él con un paso lento pero seguro, mientras dice:
- Señor General, es un gusto estar frente a usted ahora – sigue caminando hasta el escritorio – y el objetivo de mi visita es, a nombre mío y de las demás madres de los desaparecidos… - Aquí, la madre se toma una pausa y sigue caminando – es perdonarle por lo que le hizo a nuestros hijos e hijas.
- ¡¿Qué?! Responde el General.
- Asi es, señor General, lo queremos perdonar por habernos robado a nuestros hijos de nuestro lado. – La madre sigue caminando con un paso mas resuelto ahora – lo perdonamos por torturarlos, desollarlos, despellejarlos, matarlos, violarlos, masacrarlos… - El General empezó a sudar a raudales.
- ¿Qué esta diciendo bruja tonta? ¡No camine más!
- …Y luego arrojar sus cuerpos al mar… Y siguió caminando hacia él
- ¡Teniente, teniente! – Afanosamente buscó entre sus cajones su arma de dotación – Señora, le advierto, no de un paso más.
- A pesar de todo lo que nos hizo lo perdonamos…
Con sus manos temblorosas el General tomó la vieja arma y descargó los seis disparos en el cuerpo de la madre sin fallar. Esta solo retrocedió unos dos pasos y los retomó. Mientras, ella decía:
- Lo que usted hizo, sabemos que tiene sus razones y aunque no las sepamos, lo perdonamos… - La madre abrió sus brazos como si fuera a recibir a su hijo de un largo viaje que al fin concluyó y regresa a casa.
El General se queda sin aliento, una fuerte opresión en el pecho le hace soltarse la corbata, cada vez respira menos, se apoya en el escritorio y la taquicardia aumenta mientras continua sudando y el tono de su cara es de un rojo intenso, sigue viendo a la madre la cual esta en la misma posición de abrazo en espera, ella de repente ya no lo mira, entorna los ojos en blanco y cae al suelo, mientras que el general hace lo mismo pero lo ultimo que alcanza a ver antes de caer un telón oscuro son los ojos de la madre que lo continúan viendo con la ternura que solo las madres pueden transmitir con la mirada, esto infunde miedo en el infartado corazón del General y este miedo se dirige hacia su rostro dejando un gesto que el Teniente jamás podrá olvidar.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)